Jerusalén, 22 ene (EFE).- Jerusalén se convertirá en verano en escenario de un festival de la Ópera Israelí, en el que los amantes del género podrán ver “L’elisir d’amore”, obra del compositor Gaetano Donizetti, a los pies de las murallas de la ciudad antigua.
La popular comedia operística, compuesta al parecer en solo trece días y considerada con el correr de los años como una pequeña obra maestra del músico italiano, se presentará en dos ocasiones, los días 24 y 25 de junio, en las Piscinas del Sultán, una imponente explanada situada a escasos metros de la ciudadela de Jerusalén.
El festival, presentado esta semana, incluirá varios eventos musicales como conciertos vocales y actuaciones para niños en diferentes localizaciones los días 26 y 27 de junio, incluidos el Museo de Arte Judío Italiano, el Museo de las Tierras Bíblicas, el Museo de Israel y otros auditorios.
La producción de la ópera promete no defraudar a los melómanos, según adelantaron los organizadores, pues trasladarán al público al “Israel de los años cuarenta” de la mano del director artístico, Omri Nitzan, y la diseñadora Ruth Dar, que llenarán de girasoles, vehículos de época y de otras sorpresas el escenario.
Con esta iniciativa la Ópera Israelí, junto al Ayuntamiento, el Ministerio de Turismo y otras instituciones, pretenden convertir a la urbe en renovado foco de atracción turística internacional e interno para los seguidores del género lírico.
El pasado verano la proyección de películas en el marco del Festival de Cine de Jerusalén en las Piscinas del Sultán tuvo que cancelarse debido al conflicto bélico entre Israel y milicias de Gaza, que obligó a suspender cualquier acto al aire libre con la participación de cientos de personas.
La localización, que ya ha servido como escenario natural de conciertos y óperas en el pasado, es una de las más emblemáticas de la ciudad y supone todo un lujo para aquellos que disfrutan de la música con el cielo estival estrellado como cúpula.
Los organizadores aspiran a revalidar el festival en los próximos cinco años.
El alcalde Nir Barkat enmarcó la iniciativa como uno de los tantos eventos lanzados en los últimos años para promocionar la ciudad, al igual que la Maratón o una competición de Fórmula Uno.
“Jerusalén es una ciudad increíble a la que potencialmente 4.000 millones de personas desean visitar al menos una vez en la vida…Deseamos crear una nueva oportunidad con la ópera y confiamos en que llenará la ciudad de sonidos y colores”, confió el regidor.
La directora general de la Ópera Israelí, Hanna Munitz, se mostró “orgullosa de tener la oportunidad de celebrar el trigésimo aniversario del Festival de la Ópera a los pies de las murallas, en una atmósfera única. Un festival que atraerá a muchos turistas de Israel y del mundo”.
Por su parte, el director general del Ministerio de Turismo, Amir Halevy ,recordó que Israel suele atraer cada año a numerosos aficionados a los pies de Masada, o a la ciudad de San Juan de Acre, y expresó su esperanza en que “junto a Jerusalén se establezca un trío y podamos vendernos al mundo como la ‘Tierra de la Ópera”.
En el marco del festival se presentará la ópera “Dido y Eneas”, compuesta por Henry Purcell y libreto del dramaturgo y poeta Nahum Tate, que fue la primera en estrenarse en Israel. EFE
