CIUDAD DE MÉXICO, mayo 8 (EL UNIVERSAL).- Ahora no habrá que esperar al “tercer tiempo” para degustar un manjar en el banquete principal del futbol mexicano, ese al que llaman “Fiesta Grande”. Los cuartos de final en el Clausura 2016 ofrecen un par de suculentos platillos capaces de satisfacer a los paladares más exigentes: el Clásico de clásicos y el choque entre los clubes regiomontanos.
La serie que protagonizarán el América y el Guadalajara atrapa reflectores. Hacía nueve años que no se encontraban en una Liguilla. Su más reciente batalla fue durante las semifinales del Clausura 2007, con victoria para las Águilas (2-0 en el marcador global).
Sus actuales rachas, dentro de la hoy llamada Liga MX, son tan contrastantes que provocaron su encuentro en los sitios cuatro y cinco de la tabla. En teoría, será la eliminatoria más pareja.
Los dirigidos por Ignacio Ambriz cerraron la fase regular con cuatro partidos sin éxitos (par de empates y derrotas), mientras que las Chivas no cayeron en alguno de sus más recientes siete (media docena de victorias y un empate). No son superadas desde el 13 de marzo, precisamente contra los azulcrema (1-2), duelo marcado por la polémica labor arbitral de Fernando Guerrero.
Tienen presentes distintos, pero los bicampeones de la Concacaf no pierden el sueño por el dulce presente de su antítesis.
“Para nada hay miedo a Chivas”, sentencia el volante brasileño William da Silva, quien vive su primer torneo con los amarillos. “Un Clásico le pone más sabor a la Liguilla y nosotros estamos bien”.
“Dentro de la cancha somos 11 contra 11 y estamos enfocados en que traemos buen plantel. Vamos por ellos, a ganar los dos juegos”.
Lo que el América ha hecho en cuatro de las seis eliminatorias que ha ganado al Rebaño Sagrado.
Será la undécima ocasión que los dos clubes más populares del futbol mexicano chocan en una Liguilla, novena a eliminación directa. El balance favorece a las Águilas (6-2). Los únicos éxitos tapatíos llegaron en semifinales (temporada 1982-83 y Apertura 2006).
Ambas confrontaciones se cerraron en el estadio Azteca, lo que ha sido común cuando chocan dentro de la postemporada. Siete de las ocho anteriores tuvieron su segundo capítulo en Santa Úrsula, tal como ocurrirá ahora.
“Tenemos una gran posibilidad de pelear el título… Y tenemos un Clásico por delante”, presume Da Silva. “Un descuido y pueden pasar muchas cosas; necesitamos preparar muy bien el partido”.
El “Monstruo de las 100 mil cabezas” atemoriza al Guadalajara en Liguilla. Para muestra, los 533 minutos que suma sin anotar en el campo de su más acérrimo rival. El más reciente fue firmado por Luis Antonio “Cadáver” Valdez, la noche del jueves 22 de junio de 1989.
-Dominio rayado.
La historia de los choques entre el Monterrey y los Tigres, dentro de las fases cruciales, no es tan vasta, pero la balanza se carga claramente hacia los hoy dirigidos por Antonio Mohamed.
Será la quinta vez que se encuentren, cuarta a eliminación directa, y los Rayados se impusieron en las tres anteriores. La más reciente (cuartos de final del Clausura 2013), se dio con los felinos como punteros y los albiazules en el último puesto de los clasificados, panorama invertido esta vez.
“Todos sabemos cómo es la Liga mexicana. En la Liguilla es otra cosa”, recuerda Javier Aquino, atacante de los felinos. “Son partidos de ida y vuelta al que saque la mayor ventaja posible”.
-Las otras dos series.
El Santos Laguna y el Pachuca chocarán por cuarta ocasión dentro de la “Fiesta Grande” y la serie está del lado de los Tuzos (2-1), aunque nunca le han ganado un global a los Guerreros.
La primera vez que los eliminaron (cuartos de final del Clausura 2007) fue por mejor posición en la tabla. La más reciente (semifinales del Clausura 2014), debido a mayor número de goles como visitantes.
El León y el Morelia se enfrentarán por segunda ocasión en la fase final. El único antecedente (cuartos de final del Apertura 2013) fue ganado por los Panzas Verdes (7-3 en el marcador agregado).
