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Eran muchos autores. Reunidos en el “Ballroom” de la Universidad Estatal de California en Domínguez Hills, más de doscientos autores latinos de libros en inglés y español participaban en una ceremonia de premiación el pasado jueves, como preámbulo al festival que se desarrollaría este sábado 10 de septiembre en La Plaza de Cultura y Arte del corazón de Los Angeles.

-Les vamos a pedir que limiten a menos de 30 segundos su agradecimiento -dijo la maestra de ceremonias antes de empezar.

Y con la presencia de Edward James Olmos y Kirk Whisler, fundadores y promotores del Latino Book & Family Festival de Los Ángeles, se dio a la tarea de lo que parecía toda una faena de reconocimientos a los autores de 257 libros.

Probablemente algo que no se visualizaba en 1997, cuando Edward James Olmos y Kirk Whisler fundaron el “Latino Literacy Now”.

Y fue así como desfilaron autores de libros infantiles, de novelas, poesía, autoayuda, motivadores-

Todo esto salpicado por menciones a las raíces culturales que se sacudieron en cuando Olmos actuó en Zoot Suit- ¡Orale!.

Para la escritora de literatura infantil Alma Flor Ada, un verdadero icono entre los educadores bilingües de California (hay un premio en su honor), el propósito último de la literatura es el de preservar las bases de la cultura que es la palabra escrita y hablada.

De cara a las nuevas tecnologías, Flor Ada, la profesora emérita cubano-americana de la Universidad de San Francisco, aconsejó a los padres de familia a no renunciar a su papel de “narradores”.

“Mira, los padres deben empezar desde muy temprano a exponer a sus hijos a las narraciones, por muy cansados que estén de sus trabajos”.

Mientras que la lista de premiados proseguía, o algunos se acomodaban a tomarse fotos en unos enormes carteles, la autora explicaba la forma en que la tecnología debe estar en consonancia con las humanidades, donde el libro es tan importante como una computadora.

Entre los autores, había quienes seguían la tradición de recuperar la memoria familiar y los signos de identidad de los latinos.

La insistencia de algunos autores de referirse a su primer o segundo libro daba la idea de una gran comunidad que se despertó a las formas modernas de producción y distribución del libro, ya sea en papel o en formato digital.

Con su segunda novela “El discípulo del diablo”, el abogado retirado Rocky Barilla, radicado en San Francisco, reconoció que la aventura editorial es tan diversa como es diversa la propia comunidad de autores y lectores.

El recuerda que cuando era niño se imaginaba viajando a un lugar como Marbella con un montón de libros para leer, y, al final escribir el suyo.

Pero no fue sino hasta hace unos años que concretó la escritura de “A Taste of Honey”, título de la novela basado en la música que su padre solía tocar.

Barilla considera que sus temas no están anclados a los temas tradicionales de escribir la historia familiar, pero tampoco son excluyentes.

Incluso, comenta que tiene en mente dedicarle un poco más de tiempo a narrar los estilos de vida y dramas que ocurren en el patio trasero de su casa, el Valle del Silicio, la región en el mundo que produce más tecnología que ha alterado la forma en que nos comunicamos.

“Ya tengo en mente algo que me está presionando”, dijo.

El Latino Book & Family Festival de Los Ángeles

El 60º Festival Latino del Libro y la Familia Latina se llevará a cabo 10 de septiembre en la Plaza de Cultura y Arte, en el 501 N. Main Street, Los Angeles.

El evento será desde las 10 am hasta las 4 pm y contará con más de 70 ganadores del Premios de todo el EE.UU., así como grupos de Ballet Folclórico de todo el sur de California. También habrá 8 talleres sobre temas que van desde cómo conseguir ser publicado, a los libros multiculturales para los niños a cómo hacer las universidad asequibles.