Denver (CO), 16 feb (EFEUSA).- Los negocios latinos de Colorado y de Utah se sumaron hoy al “Día Sin Inmigrantes” con dispar acatamiento, ya que mientras algunos restaurantes y tiendas permanecían cerrados otros pequeños empresarios y grandes supermercados decidieron abrir.
“Los negocios están apoyando al ‘Día Sin Inmigrantes’. De hecho, sabemos que hay muchos negocios que lo apoyan porque nos envían las fotografías por los medios sociales. Y en los carteles en las puertas explican que están cerrados en solidaridad con los inmigrantes”, expresó Tony Yapias, presidente del Proyecto Latino de Utah.
“No nos estamos escondiendo, sino que es un movimiento de apoyo a la comunidad inmigrante y no sólo sobre inmigración, sino sobre otros temas, como discriminación en el empleo o en la vivienda o por tener una incapacidad”, agregó.
Pero, debido a la actual situación política del país, Yapias pidió a las personas que “se mantengan informadas y compartan buena información”.
Así, en Denver, siete conocidos restaurantes con dueños hispanos u orientados a hispanos anunciaron con antelación que hoy estarían cerrados, mientras que numerosos otros restaurantes continuaron con sus horarios habituales, pero se comprometieron a realizar donaciones a favor de organizaciones proinmigrantes.
Por ejemplo, el restaurante Pica, con dos sedes en el área de Boulder, indicó en su página de Facebook que “no nos gusta mezclar la política con el placer”, pero que, en solidaridad con la comunidad local de inmigrantes, realizará donaciones a tres organizaciones: Boulder Ayuda, Intercambio de Comunidades y el Instituto de Español.
Este miércoles, la Asociación de Restaurantes de Colorado (CRA) había advertido sobre las “protestas” de hoy, incluyendo empleados faltando al trabajo o abandonando sus puestos de trabajo.
CRA recordó que la movilización es “una actividad legal realizada con el propósito de ayuda mutua y protección”, pero se abstuvo de sugerir el cierre de establecimientos.
“Me molesta el hecho que cuando se reporte sobre el ‘Día Sin Inmigrantes’ el enfoque sólo sea el impacto en los restaurantes”, comentó el concejal Paul López, del Distrito 3 de Denver.
“Seguro que hay un impacto en los restaurantes, pero también lo hay en los consultorios dentales, las oficinas municipales, los estudios de arquitectura, las escuelas, las florerías, entre los electricistas y carpinteros e incluso en los bancos y los bufetes de abogados”, afirmó.
“Hacemos mucho más que lavar los platos y limpiar los baños”, enfatizó.
Por su parte, la dueña de una agencia de seguros en Denver, que prefirió guardar el anonimato y se identificó sólo como “una inmigrante a este país”, decidió no unirse al “boicot de un día” porque “tengo una responsabilidad con las personas que usan mis servicios y ese ejemplo de respeto habla mejor que un negocio cerrado”. EFEUSA
