México, 28 jun (EFEUSA).- El Gobierno mexicano contempla que la extradición del exgobernador de Veracruz Javier Duarte, detenido en Guatemala, podría tardar una semana, siempre y cuando este acepte el proceso en la audiencia que tendrá lugar el próximo 4 de julio.
En declaraciones a Televisa, el subprocurador jurídico y de asuntos internacionales de la Procuraduría General de la República (PGR), Alberto Elías Beltrán, afirmó que el Ejecutivo está “a la espera” de lo que ocurrirá en la audiencia.
Allí se tratarán los delitos de orden federal de lo que se le acusa: delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita (lavado de dinero).
En el caso de que Duarte acepte la extradición por ese proceso, “en ese momento estaríamos haciendo todos los trámites para su entrega inmediata”, de manera que en “alrededor de una semana, pudiera estar enfrentándose a la justicia mexicana”, apuntó.
Duarte protagonizó el martes una audiencia en Guatemala centrada en los cargos en su contra por los delitos de abuso de autoridad, incumplimiento del deber legal, peculado, tráfico de influencias y coalición.
En ella, el exgobernador veracruzano (2010-2016) aceptó su extradición por esos cargos, con el objetivo de -dijo- enfrentarse “lo más pronto posible” a la justicia.
Una vez en México, Duarte sería puesto a disposición del juez de distrito que dictó las órdenes de aprehensión por los delitos federales.
Enfrentaría el proceso en prisión preventiva, ya que la legislación mexicana así lo contempla por las acusaciones que enfrenta.
Beltrán señaló que la cuestión de dónde sería encarcelado Duarte “es una consideración que tendrá que hacer el poder judicial junto con la Secretaría de Gobernación”.
Por el momento, el juez está analizando que Duarte sea encarcelado en el Reclusorio Norte, en la Ciudad de México.
No obstante, se determinará “si por su peligrosidad debería estar en una prisión de orden federal”, aseveró el subprocurador. EFEUSA
