México, 26 feb (EFE).- Los ‘Tuzos’ de Pachuca, el mejor equipo mexicano de la última década, enfrentará el próximo 8 de marzo a Veracruz en un partido a puerta cerrada o en una sede alterna, tras la suspensión de su estadio por violencia de la hinchada.
La Federación Mexicana de fútbol confirmó que el Pachuca no podrá jugar con aficionados su encuentro de la novena jornada del torneo Clausura’08 del fútbol mexicano, luego de que el volante Christian Riveros sufriera una agresión en el partido del sábado anterior en el que los celestes golearon por 1-4 a los ‘Tuzos’.
Riveros se retiraba por en túnel cuando desde las gradas le lanzaron un petardo que le dio en el pecho y le provocó un golpe leve, en lo cual se basó la Federación para castigar al club.
El veto al estadio “Hidalgo” fue lo más significativo en el reporte de la comisión disciplinaria de la Federación, en el que también sancionó a cinco jugadores, entre ellos el defensa de los Tecos Juan Carlos Valenzuela, vetado dos juegos por haber sido expulsado y haber insultado a los árbitros.
Con un juego fueron suspendidos el zaguero Michel Orozco, del San Luis, y los volantes Jaime Lozano (Cruz Azul), Sonny Guadarrama (Morelia) y Germán Villa América), quienes recibieron tarjetas rojas en los partidos de sus respectivos conjuntos el fin de semana.
Por arrastrar un encuentro de una suspensión de dos, el delantero Jared Borgetti tampoco podrá alinear el próximo domingo en la visita del Monterrey al Santos Laguna.EFE
