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Washington, 1 sep (EFEUSA).- Los multimillonarios hermanos Charles y David Koch han emprendido una fiera pelea con los demócratas por el voto hispano en Nevada, cuyos resultados electorales pueden decidir el próximo inquilino de la Casa Blanca y si el Senado sigue bajo control republicano o pasa a manos demócratas.

Los hermanos Koch sienten poca simpatía por el candidato presidencial republicano, Donald Trump, y por ello en este ciclo electoral han decidido invertir sus multimillonarias donaciones en impedir que candidatos republicanos vulnerables pierdan su escaño en el Senado.

Los influyentes hermanos, propietarios de industrias químicas, han ayudado económicamente, por ejemplo con anuncios televisivos, a los aspirantes republicanos de seis estados que podrían poner en peligro la mayoría republicana del Senado: Ohio, Pensilvania, Indiana, Wisconsin, Florida y Nevada.

Sin embargo, en Nevada la lucha ha adquirido un carácter más personal porque los hermanos tratan de amargar la fiesta al senador demócrata Harry Reid, que se retira después décadas en la Cámara Alta y ha sido uno de los legisladores más críticos con la influencia política que ejercen los Koch con sus donaciones.

“Soy el primero que avisó sobre los hermanos Koch. Considero un estandarte de valentía ser su objetivo número uno”, dijo hoy a Efe Reid, líder de la minoría demócrata en la Cámara Alta.

“Los hermanos Koch están tratando de comprar Estados Unidos y su oscuro dinero político ha infectado nuestra democracia. En las cámaras estatales y ayuntamientos de todo nuestro gran país, los hermanos Koch y su amplia red de gasto están convirtiendo los gobiernos locales en agentes del imperio Koch”, añadió Reid.

El veterano senador trata de que la demócrata Catherine Cortez-Masto, fiscal general de Nevada entre 2007 y 2015, salga elegida en las elecciones de noviembre frente a Joe Heck, un legislador republicano que representa a un distrito de Nevada en la Cámara de Representantes de EEUU desde 2011.

Pero, la batalla entre los dos políticos ha alcanzado repercusiones épicas debido a la intrusión de los Koch, que han invertido cantidades sustanciales de dinero en The LIBRE Initiative, grupo hispano conservador que ha desplegado una gran cantidad de recursos para captar el voto latino de Nevada.

Como parte de su estrategia para llegar a la comunidad hispana de Nevada, LIBRE dio comienzo en 2013 a un programa de radio llamado “Generación Libre”, que se emite en una radio local de Las Vegas y donde miembros de la organización critican la reforma sanitaria del presidente, Barack Obama, y alaban el libre mercado.

“Creemos muy fuerte en el libre mercado, no hay otro sistema en el mundo que haya levantado a tantas personas que la libertad económica y la libre empresa”, aseguró el director ejecutivo de The LIBRE Initiative, Daniel Garza, en julio durante uno de los programas emitidos en la radio local.

Con los candidatos al Senado casi empatados, según las encuestas, el dinero se mueve ágil desde diferentes partes del país a Las Vegas, la capital del juego, y de allí a todo el estado de Nevada.

De esta forma, el grupo Freedom Partners, que recibe considerables donaciones de los Koch, ha empleado 4,5 millones de dólares en anuncios para defender al candidato republicano Joe Heck, mientras que el grupo Concerned Veterans for America ha gastado 700.000 dólares a favor de Heck, un veterano de guerra.

Cortez Masto, que podría convertirse en la primera senadora latina, también ha recibido más de dos millones de dólares de League of Conservation Voters, un grupo defensor del medio ambiente, según la base de datos Open Secrets que gestiona el Centro para una Política Responsable.

Sumergido en la vorágine de gasto, el estado de Nevada parece haberse convertido en estas elecciones en una batalla clave para la composición del próximo Senado y también en un enclave decisivo para decidir entre Trump y la candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton.

Nevada, que en teoría debería ser un estado seguro para Clinton, alberga una gran cantidad de votantes poco educados, frustrados por la situación económica y que podrían sentirse atraídos por el discurso de Trump y sus ataques a los hispanos, una comunidad con gran presencia en el estado. EFEUSA