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Un hombre observa una obra del español Antoni Tapies durante la inauguración del Art Basel Miami Beach la noche del miércoles 3 de diciembre 2014, en Miami Beach, Florida. El gran espectáculo de las artes plásticas en que se ha convertido Art Basel Miami Beach, que abrió hoy, jueves 4 de diciembre sus puertas al gran público, debe buena parte de su arrolladora convocatoria a los artistas iberoamericanos, tanto maestros del siglo XX como creadores contemporáneos y figuras emergentes.
Un hombre observa una obra del español Antoni Tapies durante la inauguración del Art Basel Miami Beach la noche del miércoles 3 de diciembre 2014, en Miami Beach, Florida. El gran espectáculo de las artes plásticas en que se ha convertido Art Basel Miami Beach, que abrió hoy, jueves 4 de diciembre sus puertas al gran público, debe buena parte de su arrolladora convocatoria a los artistas iberoamericanos, tanto maestros del siglo XX como creadores contemporáneos y figuras emergentes.
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Miami, 4 dic (EFEUSA).- La resonancia internacional que ha adquirido Art Basel Miami Beach con cada nueva edición encuentra uno de sus ejes indiscutibles en la fuerza con que el arte iberoamericano se ha consolidado en el mercado y en el prestigio de sus galerías y de sus jóvenes creadores.

El gran espectáculo de las artes plásticas en que se ha convertido Art Basel Miami Beach, que abrió hoy sus puertas al gran público, debe buena parte de su arrolladora convocatoria a los artistas iberoamericanos, tanto maestros del siglo XX como creadores contemporáneos y figuras emergentes.

De hecho, las galerías donde se exhibe arte de impronta hispana capta la atención y el interés de marchantes y ávidos coleccionistas, además del numeroso público que abarrota los 20.000 metros cuadrados del recinto ferial del Centro de Convenciones de Miami Beach.

En su décimo tercera edición, los organizadores esperan que más de 70.000 visitantes, una buena parte turistas, recorran el laberinto de pasillos y las 267 galerías que integran la exposición, considerada la más importante de las Américas.

Entre los cerca de 4.000 artistas del siglo XX y XXI con obra expuesta en esta cita que concluye el próximo domingo encuentra lugar preeminente la creación iberoamericana, tanto por el número de artistas representados como por la calidad de su obra, si bien se echa de menos mayor presencia de los grandes maestros latinoamericanos del siglo pasado.

Una antología viva del arte iberoamericano presente en la feria debe incluir los trabajos de los argentinos Antonio Asís, Jaime Davidovich y Liliana Porter, en las galerías Sicardi, Henrique Faria y Ruth Benzacar, respectivamente; del colombiano Jose Antonio Suárez Londoño (galería Casas Riegner) y de una de las principales figuras del siglo XX: la pintora y escultora uruguaya Amalia Nieto (1907-2003).

El artista más importante de la tendencia geométrica y del movimiento Neoconcreto, el pintor brasileño Ivan Serpa (1923-1973), cuenta con obra expuesta en la Galerie 1900-2000, mientras que el español Antoni Tapies (1923-2012), uno de los principales exponentes a nivel mundial del informalismo, está representado en las galerías Waddington Custot y Timothy Taylor.

La cotizada obra del pintor argentino Guillermo Kuitca (Buenos Aires, 1961), que ha sido exhibida en el MoMA, en la dOCUMENTA y en el Reina Sofía, puede contemplarse en la galería Sperone Westwater.

El escultor y arquitecto mexicano Pedro Reyes (Ciudad de México, 1972), con obra expuesta en la galería Sperone Westwater, presenta dos bustos en piedra volcánica negra de enorme impacto visual que corresponden a Karl Marx y Leon Trostky.

“Este tipo de roca se utiliza mucho desde los aztecas y a mí me interesa la idea del monumento, de la resistencia al olvido y del busto considerado como un genero que prácticamente desapareció de la historia del arte contemporáneo”, destacó a Efe Reyes.

El lenguaje abstracto que predomina en la obra escultórica de Reyes tiene su contrapunto en los trabajos fotográficos y de collage de los españoles Oriol Vilanova y Regina de Miguel expuestos en las galerías Parra & Romero y Maisterravalbuena, respectivamente.

Vilanova (Barcelona, 1980) presenta su obra “Quizá es cierto en teoría” como una nueva lectura de los conceptos de cliché, simbología, anonimato y autoría, fundamentada en el comentario del belga René Magritte tras visitar el Museo Uffici, de Florencia: “Vi ‘Le Printemps’ (La primavera) de Botticelli, no está mal, pero está mejor en postal”, apuntó a Efe el galerista.

El proyecto fotográfico de De Miguel, integrado por 37 imágenes en bajo relieve y una placa de latón con grabaciones, remite a un mundo de soledad y aislamiento y recrea en la placa dorada un viaje a través del espacio.

“Aparte del pequeño grupo de galerías que trae grandes maestros de la modernidad del siglo XX, hay un gran pelotón de galerías que ofrecen obras muy experimentales y de transvanguardia, de artistas emergentes”, resaltó a Efe Ramón Cernuda, propietario de la galería homónima.

En opinión de Cernuda, una de las obras mejor representadas en la feria es la del pintor, profesor, escultor y teórico del arte uruguayo Joaquín Torres García (1874-1949), creador del Universalimo constructivo

Pero lamentó el galerista que no haya expuesta en la cita más obra del Modernismo latinoamericano, una “omisión que “sorprende”, ya que “este movimiento del siglo XX ha logrado espacio de reconocimiento dentro del gran coleccionismo global”.

La reconocida galería Travesía Cuatro apuesta por la obra de la mexicana Milena Muzquiz (Tijuana, 1972), quien ha realizado 25 piezas de cerámica muy influida por la visión metafísica de De Chirico y, “obsesivamente, por los desastres y la violencia que arrasa el mundo; de ahí ese aire apocalíptico, como de enfermedad mundial” que expresan sus trabajos, comentó a Efe.

Esta muestra recoge también las propuestas de los españoles Jose María Sicilia, Lara Almarcegui y Elena del Rivero, entre otros, y de importantes valores hispanoamericanos como los peruanos Nicolás Lamas y Rita Ponce de León, o la argentina Adriana Bustos. EFEUSA