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La franquicia de Cleveland, liderada por LeBron James, consigue su primer título de la NBA, remontando un 1-3 ante los Warriors de Golden State. El alero estrella de los Cavaliers cumple su promesa de dar al equipo de Ohio su deseado anillo y ganar su duelo particular con Stephen Curry.

“Estoy contento por ser parte de la historia”, manifestaba un eufórico Lebron James tras ganar el séptimo y último partido de las Finales ante los Warriors de Golden State, un encuentro disputado en el Oracle Arena de Oakland que da más valor al triunfo de los Cavaliers, que remontaron un parcial adverso de 1-3 en los cuatro primeros partidos para vencer en los tres últimos.

LeBron y los Cavaliers han hecho historia en la ciudad de Cleveland (Ohio), que no ganaba un título liga desde 1964 cuando lo consiguieron los Browns de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL).

“Estoy en casa? No tengo palabras. Esto es increíble”, insistía LeBron, nacido hace 31 años en Akron a 40 millas de Cleveland, feliz tras el triunfo de su equipo y su actuación personal, autor de un triple-doble (27 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias) y de ensombrecer la actuación del base rival, Stephen Curry, que sólo anotó 17 puntos.

Lebron, que lidero a su equipo en la remontada anotando 41 puntos en los partidos quinto y sexto, cambió la historia de la competición.

¡Cleveland, esto es para ti!”, gritó James durante la entrevista que le realizaron en la cancha después del encuentro, poco antes de escuchar su nombre como el Jugador Más Valioso (MVP) de la final, un reconocimiento que obtuvo por tercera vez en su carrera.

LA CULMINACIÓN.

“Luchamos hasta el final, nunca nos dimos por vencidos, buscamos a partir del quinto partido en darlo todo en el campo, sin importar lo que pudiese suceder”, destacó James. “Lo de esta noche fue la culminación, que siempre confiamos en nosotros mismos”.

James, que ahora tiene ya tres títulos de liga, los dos primeros ganados con los Heat de Miami, también dijo sentirse feliz y aliviado porque la maldición de los 52 años en Cleveland sin un equipo campeón había llegado a su final.

“Es algo grandioso el haberle dado a la ciudad el título que tanto se merecía”, reiteró James. “Ahora todo será diferente de cara al futuro”. James reivindicó su decisión de dejar a los Heat y volver a Cleveland porque sabía lo que quería alcanzar.

Además de James, el triunfo de los Cavaliers tuvo otras destacadas figuras como el base Kyrie Irving, autor de 26 puntos y el jugador que a falta de 53 segundos para el final anotó un triple que rompió el empate a 89-89 que había en el marcador.

Irving alabó el juego de su compañero James, “simplemente es el mejor jugador del planeta”, y dijo que aprendía cada día de él. “Su manera de planear un partido es como si se tratase de Ludwig van Beethoven con la música”.

Otro de los triunfadores de la temporada es el técnico de los Cavaliers, Tyronn Lue, que en su primer año ha conseguido guiar a la franquicia de Cleveland a su anhelado anillo. “Esta noche hicimos historia”, sentenció Lue. “Cleveland, Ohio, allá vamos”.

EFE REPORTAJES.