Nueva York, 3 abr (EFEUSA).- Deslenguada, hilarante, amarga y combativa, la obra de teatro “Los monólogos de la vagina” lleva 15 años de éxito internacional, pero su autora, Eva Ensler, tenía pendiente que se pudiera representar en español en la ciudad en la que nació, Nueva York, algo que sucederá por fin el 6 de mayo.
“Hay muchas mujeres en Nueva York que no hablan inglés y el propósito de este montaje es llegar a todas ellas. Eve Ensler insistió en que la hiciéramos en español y que habláramos a las mujeres latinas”, dice a Efe el director de la obra, Jaime Matarredona, que extiende así su relación con estos monólogos después de 14 años al frente de la producción en Ciudad de México.
“Los monólogos de la vagina” ha sido traducida a 48 idiomas y representada en 140 países y este nuevo montaje, muy fiel al texto original, tomará el pequeño teatro Westside, situado entre algunos de los santuarios del musical de Broadway, y donde desde 1999 hasta 2003 se llegó a representar 1381 veces.
“Es una obra basada en el poder de la palabra”, dice Matarredona, quien crea un escenario minimalista en rojo y blanco y considera que esta obra tiene un “poder transformador” que hace que la sociedad pierda el miedo a la palabra “vagina”.
“Hasta hace unos años, la escribían en el procesador de textos y la subrayaba en rojo, como si fuera un error ortográfico. Para mi hija, que ve la obra desde que es muy pequeñita, es lo más natural del mundo la palabra vagina. Se trata de romper esos mitos que están frenando al ser humano”, dice el director.
Ese ser humano “que es el único capaz de reírse”, recuerda, y por eso cree firmemente que “la mejor forma de retratarnos a nosotros mismos, de no victimizarnos es reírnos de nosotros mismos”.
Sin embargo, Matarredona apunta que, en la gran vigencia del texto en la que apenas ha habido que mover una coma, sí que ha tenido que cambiar las cifras referentes al maltrato a las mujeres. “Lo único que sigue evolucionando para mal es la violencia contra la mujer, a pesar de que la corriente general dice que no”, se lamenta.
Cate Blanchett, Glenn Close, Jane Fonda, Kate Winslet, Meryl Streep, Rosario Dawson, Rosie Pérez o Salma Hayek han sido estrellas invitadas que han sentido la necesidad de apoyar este discurso liberador y analítico sobre la mujer del nuevo siglo, y este montaje, aunque no ha cerrado su reparto, contará con una estrella invitada y un reparto rotatorio.
“No es tanto una obra actoral como de quien tome el personaje y lo haga suyo según su experiencia. Puede ser Salma Hayek o puede ser Cate Blanchet, pero también médicos, activistas o políticas”, dice el director.
“Los monólogos de la vagina” está basada en más de 200 entrevistas con mujeres sobre su sexualidad, y su director destaca entre ellos uno que se llama “Conquistando el coño”, que lejos de ser soez cambia el tono fuerte que esta palabra tiene en países como México.
“Lo que hacemos en ese monólogo es que nuestra actriz toma la palabra, la deletrea y se la adueña y en ese momento deja de ser ofensiva, peyorativa. Eso me parece que es una gran forma de retratar ‘Los monólogos de la vagina’. Hay muchas formas de decir las cosas y hay muchas cosas que han estado estereotipadas en la raza humana y es el momento de cambiarlas”, asegura.
Y, pese a ser una obra tan femenina, el director considera que tiene sentido también tener un componente masculino en el montaje. “Entiendo por qué siempre me lo preguntan, pero tengo a mí favor que el director en Broadwway fue Joe Mantello y me siento muy honrado en dirigirla”, dice.
“Supongo que la vida me puso en este lugar para balancear las cosas. Es fácil caer en el sensacionalismo, es una tendencia natural del ser humano y mi postura masculina compensa un poco para que se vuelva universal”, concluye.
Producida por los mexicanos Morris Gilbert y Federico González Compeán, parte de la recaudación irá destinada a la fundación sin ánimo de lucro VDay.org, un movimiento global creado por la propia Ensler con el objetivo de erradicar la violencia en contra de mujeres y niñas en todo el mundo. EFE
