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Una abuela y su nieto caminan por el barrio de Santurce, en San Juan, donde los artistas se preparan para la quinta edición del festival "Santurce es Ley", que se celebra este fin de semana y que agrupa un nutrido grupo de muralistas locales e internacionales.
Una abuela y su nieto caminan por el barrio de Santurce, en San Juan, donde los artistas se preparan para la quinta edición del festival “Santurce es Ley”, que se celebra este fin de semana y que agrupa un nutrido grupo de muralistas locales e internacionales.
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San Juan, 15 ago (EFEUSA).- Puerto Rico conmemora hoy 25 años de la Ley para la Prevención e Intervención con la Violencia Doméstica, fecha que coincide con el asesinato a manos de su pareja de una mujer y que recuerda un problema que en 2013 le costó la vida a 19 personas.

La norma fue firmada un 15 de agosto de 1989 y hoy, un cuarto de siglo después, hay consenso sobre que se trató de una ley que fue toda una innovación en su época y fuente de inspiración para legislación en países de América Latina como modelo para la lucha contra la violencia de género.

Uno de los primeros artículos de la norma señala que el Gobierno de Puerto Rico reconoce que la violencia doméstica es uno de los problemas más graves y complejos que confronta la sociedad de la isla, tema en el que más de dos décadas después se ha avanzado pero al que en ningún caso se ha puesto fin.

Muestra de que el problema sigue anclado en la sociedad puertorriqueña y causa que ha ensombrecido el aniversario es la noticia del asesinato hoy de una mujer a manos de su pareja en Gurabo, municipio del interior de la isla caribeña.

La mujer, según el informe policial, fue disparada mortalmente en la cabeza por su marido en la residencia familiar de Gurabo frente a dos menores antes de darse a la fuga en la zona.

La muerte de esta mujer se convierte en la novena en lo que va de año a causa de violencia de género, dos de las cuales se corresponden con hombres.

Las muertes en 2013 atribuidas a violencia doméstica alcanzaron las 19, de ellas 17 fueron mujeres y las dos restantes varones, según datos facilitados por la Policía de Puerto Rico.

Los asesinatos son la más dramática muestra de la violencia en el ámbito familiar, pero solo una pequeña parte de un problema muy extendido entre la población de Puerto Rico, donde en 2013 se registraron 11.696 incidentes relacionados con la violencia doméstica.

Solo en el pasado mes de julio la Policía de la isla caribeña registró 586 casos de violencia de género.

La senadora del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) María de Lourdes Santiago señaló en un comunicado en relación a los 25 años de la aprobación de la norma que a pesar de que se debe celebrar el camino recorrido también hay que mirar sobre lo mucho que queda por hacer.

“La aprobación de la Ley 54 fue el resultado del esfuerzo de mujeres de los sectores más diversos. Gracias a ellas se superó aquella visión de que la violencia de pareja era un asunto doméstico en el que sobraba la intervención del Estado y hoy contamos con una legislación de avanzada, pero no basta con lo que disponga un estatuto”, indicó.

Santiago destacó que falta mucho para erradicar las condiciones de desigualdad económica, de marginación y falta de apoyo que permiten que las cifras de maltrato, en sus distintas versiones, sigan “siendo alarmantemente altas”.

La legisladora señaló, además, que es fundamental incrementar los esfuerzos para que el Estado revise su función en el caso de la violencia doméstica e implemente preparación específica entre los agentes de la Policía para atender casos de este problema.

La secretaria de Asuntos de la Mujer del PIP, Edda López, coincidió en los puntos señalados por la senadora y propuso una revisión de la gestión que realizan las agencias de Puerto Rico envueltas en la violencia doméstica.

López destacó la importancia de contar con estadísticas adecuadas, ya que son clave para planificar los recursos asignados para ofrecer servicios de apoyo a las víctimas.

Recordó que actualmente no se recogen las estadísticas de casos de violencia doméstica reportados por la Oficina de la Procuradora de las Mujeres, sino que se recurre exclusivamente a los informes de la Policía de Puerto Rico, que además suelen diferir de los datos reportados por la Administración de Tribunales. EFEUSA