Skip to content
  • Elisse Davis (der.), una recepcionista afroamericana que trabaja a un...

    Elisse Davis (der.), una recepcionista afroamericana que trabaja a un lado de otra latina Anilú Suárez (izq.) en la Marco Antonio Firebaugh High School, de Lynwood, considera que la educación y las efemérides si pueden sensibilizar a las personas con respecto a los valores de los Derechos Civiles.

  • Yo creo que el racismo puede cambiar solamente cuando los...

    Yo creo que el racismo puede cambiar solamente cuando los paremos en nuestra misma familia , dice Clara Martínez (42) oriunda de Puebla, México. Yo tengo un hijo que cuando presiente que algo está mal, dice mm Eso es racismo.

  • Aspectos de uno de los desfiles de MLK en el...

    Aspectos de uno de los desfiles de MLK en el Sur de California.

of

Expand
Author
PUBLISHED: | UPDATED:

Lo decía así el Dr. King: “En última instancia, la medida de las personas no está en su comportamiento cuando están en momentos de comodidad y conveniencia, sino en su comportamiento en tiempos de desafíos o controversia”.

La frase del líder de los Derechos Civiles Martin Luther King Jr resume el problema de las relaciones interraciales en el país.

Si se les pregunta, la mayoría de las personas dirían que no son racistas, y que aceptan la diversidad. Después de todo, en la música, el deporte, el cine- hay la presencia de atletas y artistas de varios grupos raciales.

Pero cuando hay competencia por recursos o surgen hechos de violencia como Férguson o la llegada de niños centroamericanos, la respuesta es otra.

En momentos de crisis, los prejuicios y estereotipos, suelen suplantar al pensamiento racional.

ENCUESTAS DE ACTITUDES

Según un estudio de la WK Kellog Foundation sobre “Estado de la Familia Latina”, la mayoría de latinos (84%) creen que la policía está para servirlos, pero más de dos tercios se siente en riesgo de que podrían utilizar un exceso de fuerza contra ellos.

“Esto nos recuerda que todavía tenemos un largo camino por recorrer en términos de la relación entre las comunidades y las fuerzas del orden”, dijo Gail Christopher , vicepresidente de políticas y asesor senior de la Fundación Kellogg. “Vimos lo de Ferguson, y creo que es verdad con los jóvenes latinos en general.”

El problema del racismo es que con frecuencia se mezcla o se confunde con el enforzamiento de la ley. Thomas A. Sáenz, presidente y consejero general de la Mexican American Legal Defense y el Fondo para la Educación, cree que un contexto nacional preocupante está contribuyendo a esta desconfianza, incluyendo la importancia de figuras como Joe Arpaio, del Condado de Maricopa de Arizona. Un tribunal federal de distrito dictaminó el año pasado que Arpaio violó la Constitución de Estados Unidos mediante el uso de perfiles raciales, así como detenciones ilegales que tuvieron como objetivo los latinos.

EDUCACION Y EFEMERIDES

Fuera de los momentos de crisis ¿sirven de algo las efemérides o bautizar una calle o un edificio con el nombre de alguien que nos recuerde los Derechos Civiles?

El 19 de enero, a nivel nacional se considera un día festivo para honrar la memoria de Martin Luther King Jr. Ese día, en escuelas y oficinas públicas se realizan eventos y desfiles para recordar las ideas de MLK. Aunque fue firmada como ley en 1983, no fue sino hasta en el 2000, cuando todos los 50 estados observaron esta fecha festiva de manera oficial.

En general, es aceptado que los “holidays” y el nombramiento de escuelas y espacios públicos cumplen una función educativa.

En la ciudad de Lynwood, hay un punto en que se juntan las efemérides latinas y afroamericanas. A un costado de la autopista 710, donde empieza el Martin Luther King Blvd, se encuentra también la Marco Antonio Firebaugh High School, este último es un inmigrante oriundo de Tijuana que dirigió antes de morir la Asamblea Estatal de California.

“Yo si creo que esto ayuda a la educación y aquí donde estamos es precisamente el encuentro entre lo afroamericano y lo latino”, dice Elisse Davis, una recepcionista afroamericana que trabaja a un lado de otra latina, Anilú Suárez.

Pero, además, considera que la mayor interacción entre los grupos es necesaria.

“Mi mejor amigo es latino. También es mi esposo- ¿Cómo lo conocí?… El era mi jefe”, dice.

Para Davis, muchos de los problemas interraciales son cuestión de percepción y esta es afectada por la educación y las experiencias personales.

“El problema es que mucha gente tiene una ‘visión de tunel’ y no quiere ver a los lados, no quiere ser educada”, dice.

Anilú Suárez cree que la sensibilidad interracial es algo que se irá mejorando conforme pasan las generaciones.

“Yo tengo primos que se han casado con afroamericanas, y eso abre las puertas a un gran aprecio mutuo”, dice Suárez.

Ella misma reconoce que el matrimonio interracial es una posibilidad para sus hijos, aunque sus propios padres no lo hubieran aceptado.

“La gente joven va a ser más educada y va a tener menos problemas”, dice.

PREDICAR CON EJEMPLOS

El racismo entre latinos se suele referir no solamente al color de la piel, sino a la procedencia rural. “Oaxaquita”, “chúntaro”, “naco”, “mayate” en incluso “indio”, son solo algunos de los epítetos que suelen “mostrar el cobre” de las personas.

“A mí no me molesta si me dicen ‘indio’ de manera bien intencionada”, dice un vendedor de artesanías de la Plaza México en Lynwood. “Pero, he visto casos de que un mexicano de Sinaloa, por ejemplo, le dice ‘oaxaquita’ a otro como yo”.

ESCUELA Y FAMILIA

“Yo creo que esto puede cambiar solamente cuando los paremos en nuestra misma familia”, dice Clara Martínez (42) oriunda de Puebla, México. “Yo tengo un hijo que cuando presiente que algo está mal, dice- mm- Eso es racismo.”

Lo que señala Martínez es algo que pone de relieve la importancia de los maestros en las escuelas.

Paradójicamente, los hijos pueden educar a los padres, de la misma forma que les ayudan con el inglés.

Mientras cuidaba a sus hijos en el parque adyacente al Centro Rosa Parks de Lynwood, Martínez explica que no es fácil sobreponerse a los prejuicios raciales.

Sus roces con afroamericanos han sido a partir de situaciones de conflicto.

“Cuando íbamos cruzando la frontera, a mí y a otra señora nos agarraron, y una oficial afroamericana nos preguntó ‘¿a qué vienen acá?’. Nosotros le dijimos ‘¿cómo que a qué?… A trabajar. Luego nos dijo: ustedes vienen solo a ver telenovelas”.

Sin embargo, reconoce que viviendo en los Estados Unidos, donde hay más diversidad racial, los inmigrantes se educan más para apreciar los distintos modos de las culturas.

Con un suegro anglosajón llamado Keneth, dice que a veces algunos amigos los critican por haberle puesto a su hijo un nombre anglo.

Pero lo cierto es que como familia, cada Año Nuevo se la pasan con los amigos afroamericanos de su esposo que viven en Los Angeles.

DIVERSIDAD LATINA

En un recorrido que empezó en South Gate en el Café Mi Tierra, y que terminó en la Plaza México, de Lynwood, se les hizo la misma pregunta a una docena de latinos, incluyendo profesionistas latinos, si conocían quiénes eran los garífunas.

Nadie lo supo.

Los garífunas son los descendientes de un grupo de africanos que fueron traídos al continente americano, pero que nunca fueron esclavos, ya que luego de un naufragio en 1635 se escaparon a la Isla de San Vicente y de ahí se fueron radicando en los que hoy es Belice, Honduras, Nicaragua y el Norte de Guatemala.

“Aquí hay mucho desconocimiento, además de que te siguen viendo mal y te etiquetan”, dice Amina Mendoza, vocera de la publicación para promover la cultura garífuna www.dumurei.com. “Yo nací en Belice, (donde se habla inglés) y ahí no se siente tanto las diferencia de razas”.

Los garífunas se localizan principalmente en New York y Los Angeles. Aquí, el 19 de noviembre celebran el “Garífuna Day” en la ciudad de Inglewood.

En México, la influencia africana fue también muy notoria, al grado de que según las investigaciones del Dr. Alvaro Ochoa, del Colegio de Michoacán, el origen remoto del mariachi es afromexicano, no obstante que haya integrado instrumentos y nomenclatura europea posteriormente.

“Se originó en los fandanguillos de los esclavos en México”, dice, “incluso el Son de la Negra es todavía una muestra de ese origen”.

Hablar en términos del color de la piel sobre los latinos es algo que presenta riesgos. El componente árabe de los españoles que llegaron a Latinoamérica (después de cuatro siglos de dominación), y los diversos mestizajes que han ocurrido con franceses (Altos de Jalisco), europeos (Argentina) y africanos (Caribe, Centro y Sudamérica), hace muy limitante reducirlos a “browns”.

Eso lo sabe bien Connie Rivero, una mujer rubia oriunda de Santa María del Rosario, Cuba, quien tiene una tienda de artesanía mexicana y artículos religiosos en la Plaza México de Lynwood.

“Mira, yo soy de Cuba y allá puedes bromear por cuestiones de tu apariencia pero el racismo está bastante penado hacerlo”, dice.

Rivero dice que en sus 25 años de estancia en California ha hecho todo tipo de trabajos, desde vender flores en los semáforos, limpiar oficinas hasta ser gerente de servicios en el aeropuerto de Los Angeles.

Acepta que el color de su piel a veces le ha beneficiado.

“Mira, cuando yo trabajaba por los rumbos de la Hawthorne y 132, me fijaba que la policía a veces detenía a los más morenos, pero no a mí”.

EN BUSQUEDA DE LA NORMALIDAD

La cuestión racial es un problema cuando se convierte en un asunto reiterativo y obsesivo que impide enfocarse en otros asuntos de la personalidad, como la capacidad de trabajo, el talento artístico- Todo eso que mencionaba el doctor King en su famoso discurso “I Have a Dream”.

De hecho, algunas veces, tener una conversación sobre la cuestión racial se vive como motivo de extrañamiento: ¿por qué otra vez el mismo tema?

Políticamente es claro que teniendo una mayor representatividad en el cine, televisión, gobierno, lugares de trabajo- se podría reducir la discriminación y el racismo.

Sin embargo, algunas veces los rezagos económicos concentrados en un grupo étnico dificultan tal propósito.

Jose.fuentes@impactousa.com