Washington, 30 jul (EFEUSA).- La Casa Blanca amenazó hoy con vetar el proyecto de ley sobre el plan de emergencia para la crisis fronteriza planteado por los republicanos de la Cámara de Representantes si este llega a ser aprobado por el Congreso.
“Los republicanos han tenido más de un año para reparar integralmente el sistema de inmigración de la nación, pero en lugar de trabajar hacia una solución real y duradera, han lanzado una legislación por partes que sólo supondrá más exigencias arbitrarias y poco realistas en un sistema ya roto”, dijo la Administración en un comunicado.
La legislación, sobre la que los republicanos esperan celebrar una votación el jueves, responde a la solicitud del presidente para obtener fondos de emergencia para hacer frente a la avalancha de menores, y contrarresta la propuesta de los demócratas del Senado, que han propuesto un plan valorado en 2.700 millones.
El texto incluye las disposiciones destinadas a modificar la ley de 2008 contra el tráfico humano, con el objetivo de acelerar las deportaciones de los mejores que provengan de Guatemala, Honduras y El Salvador, que son los principales países de procedencia de los niños.
A este respecto, los demócratas se han opuesto de manera radical a cualquier modificación de esa ley así como a cualquier medida que “menoscabe” los derechos de los niños y de los inmigrantes, como la propuesta de algunos conservadores de eliminar la conocida como acción diferida, que evita la deportación desde 2012 a millones de jóvenes que llegaron a EE.UU. siendo unos niños.
“Al establecer plazos arbitrarios para la tramitación de los casos, este proyecto de ley podría generar retrasos que en última instancia derivarían los recursos de la objetivos de seguridad pública prioritarios, como la deportación de criminales”, agrega la Casa Blanca.
Unos dos tercios del presupuesto irían destinados al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), que se encarga de manejar los asuntos migratorios y la seguridad fronteriza, así como para el Departamento de Justicia, que coordina los procesos judiciales.
Aproximadamente un tercio sería para el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, en inglés), encargado de cuidar de los niños que llegan solos a la frontera, una cifra tremendamente inferior a la planteada por Obama, que pretendía otorgar al cuidado de los menores 1.800 millones de dólares con el objetivo de garantizarles un trato humanitario.
“Este proyecto de ley va a socavar el debido proceso para los niños vulnerables, lo que podría resultar en su expulsión a situaciones que amenazan sus vidas en el extranjero. Además, los limitados recursos previstos no se han designado como de emergencia, sino que se producen a expensas de otras funciones gubernamentales”, insiste la Administración.
Demócratas y republicanos no se ponen de acuerdo para aprobar un presupuesto de emergencia que responda a las necesidades generadas por la crisis fronteriza, y parece muy improbable que alcancen un consenso antes del receso de agosto que comienza este viernes. EFEUSA