Tucson (AZ), 14 dic (EFEUSA).- Representantes de diferentes iglesias interrumpieron hoy una audiencia en la corte federal de Tucson, Arizona, donde procesan bajo la Operación Streamline a inmigrantes que cruzaron la frontera sin documentos.
La Operación Streamline procesa de manera colectiva alrededor de 70 inmigrantes diariamente, hombres y mujeres que llegan encadenados en sus tobillos, cintura y muñecas y son acusados de haber cruzado la frontera ilegalmente.
A 15 minutos de iniciada la audiencia, que se celebra diariamente a la 1:30, la pastora de la iglesia Presbiteriana del Sur de Tucson, Alison Harrington, interrumpió el proceso gritando a los inmigrantes de que no eran culpables de lo que les estaban acusando y acto seguido procedió a leer un versículo de la biblia.
Luego la pastora, acompañada por otros 11 clérigos, se movilizó gritando “tú no eres culpable, esta corte es culpable”, para instalarse en las afueras del edificio federal donde protestaron junto a activistas y miembros de la comunidad en contra de este operativo.
“Como pastores de la frontera del sur de Arizona, nos unimos a miembros de la comunidad, miembros de nuestras congregaciones y defensores de los derechos humanos, para expresar nuestra indignación por el procedimiento de la Operación Streamline”, dijeron los pastores a través de un comunicado de prensa.
“En las comunidades fronterizas, la Operación Streamline es conocida como una parodia de la justicia, para nosotros es un ultraje moral y permanecer en silencio es llegar a ser culpable de la criminalización de esos a quien Cristo les da la bienvenida”, agregó la nota.
Los clérigos afirmaron que la Operación Streamline ha sido declarada inhumana, ineficaz, y una pérdida de dinero de los contribuyentes.
Los tribunales internacionales han encontrado que es una violación de los derechos humanos y el derecho internacional.
Los pastores agregaron que la Oficina del Inspector General ha determinado que no hay evidencia objetiva de que la Operación Streamline sea un proceso eficaz como elemento de disuasión y que es una pérdida de dinero.
Además, los clérigos afirman que la criminalización y el encarcelamiento masivo de los trabajadores inmigrantes les han costado a los contribuyentes más de 5 mil millones de dólares en los últimos cinco años con una ganancia de 90 millones anuales para la industria de las prisiones privadas.
“Más allá de todo esto, es claro para nosotros que la Operación Streamline es una afrenta a nuestra fe y al mandamiento de Cristo de dar la bienvenida al forastero”, dijeron los clérigos.
“Hemos interrumpido la corte y no fue algo hecho a la ligera, la corte es a su manera un lugar sagrado, pero interrumpimos el proceso hoy porque ya han sido interrumpidas de una manera mucho más preocupante por la Operación Streamline”, concluyeron los religiosos. EFEUSA
