Mes de la Hispanidad: Sí celebre, pero también participe
Dos casos muy peculiares sucedieron a lo largo de estas dos semanas que involucran al ICE (Servicio de Inmigración y Aduanas en inglés). Primero, el día de ayer en Houston Texas, 11 indocumentados fueron atrapados en una redada mientras que trabajaban en una fábrica de tortillas. Como los agentes de migración o ICE investigaban delitos de parte del patrón y los indocumentados, que eran explotados, sirvieron de testigos, les fue conferida a estos una visa especial para víctimas, con la cual pueden seguir trabajando en este país temporalmente, ahora sin el temor de ser explotados por su estatus migratorio.
Por otro lado, hace 10 días, el ICE llegó a un acuerdo por una redada injustificada que realizó en un complejo de departamentos en Charlotte, Carolina del Norte.
Según testigos, los oficiales, sin orden de registro, comenzaron a golpear puertas gritando “policía”. Entre insultos raciales y amenazas con arma, estos agentes migratorios detuvieron a residentes del complejo sin sospecha razonable de haber participado en un crimen.
Al final, los detenidos fueron liberados por falta de pruebas, mientras que recibieron 7 años de alivio migratorio y además 310,000 dólares entre todos gracias a la ayuda de organizaciones activistas pro-inmigrantes.
Por un lado, una acción justa fue tomada por el ICE en el primer caso. Por el otro, una atrocidad fue cometida en nombre de la ‘seguridad nacional’.
Los agentes del ICE tienen un trabajo por el cual les pagan, obviamente hay ocasiones en las que obran justamente, y hay otras en las que lo hacen abusando de aquellos que supuestamente no pueden protegerse.
Son casos como este último en los que la unión entre hispanos es tan necesaria. En días como hoy, se hace más que necesario gritar una gran verdad ante tanta propaganda negativa en nuestra contra.
El hecho es que la gran mayoría, llegamos a este país a trabajar y a sacar adelante a nuestras familias, esto es respaldado por un estudio de The American Inmigration Council
Otro hecho es que no podemos separar nuestra hispanidad de nuestra naturaleza como inmigrantes en este país. En verdad creo esa frase de “si se lo hacen a uno, nos lo hacen a todos”. El hacernos apáticos antes los problemas de nuestra propia gente, ante los abusos y las injusticias, no solo nos hace parte del problema, tarde o temprano será un hecho que tengamos que confrontar.
Esta ola cíclica anti-inmigrante es como una bola de nieve, si no hacemos nada por pararla mientras que arrastra a otros a su paso, terminara aplastándonos en medio de nuestra apatía.
Infórmese, denuncie, participe. Asociaciones que defienden a los inmigrantes siempre están en busca de ayuda.
