Washington, 15 ago (EFEUSA).- Con más de medio millón de jóvenes amparados por ella, la conocida Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), cumple hoy dos años de entrar en vigor mientras resurge su protagonismo en los debates sobre política migratoria en los que unos quieren acabar con ella y otros ampliar su alcance.
Los republicanos de la Cámara de Representantes, alentados por el senador Ted Cruz (Texas) y el legislador Steve King (Iowa), cercanos al Tea Party, aprobaron un proyecto de ley antes de comenzar el receso de verano con el objetivo de poner fin al programa, a raíz de la crisis migratoria infantil que golpea la frontera sur.
El ala más conservadora del Partido Republicano cree indispensable acabar con la DACA, a la que consideran una “amnistía” para quienes entran en el país de manera ilegal, en un duro viraje de su postura sobre la reforma migratoria, sobre la que a principios de año se mostraron más abiertos a dialogar.
Sin embargo, a medida que se acercan las elecciones legislativas de noviembre y tras surgir la oleada de niños centroamericanos en la frontera, la estrategia de los conservadores les ha llevado incluso a apoyar la eliminación de la Acción Diferida, a sabiendas de que es uno de los programas más aplaudidos por la comunidad latina.
“Nuestros Soñadores son estadounidenses en cada aspecto de la vida, menos en el papel. Debemos hacer más para mejorar su vida, no ponerla en riesgo como (el presidente de la Cámara Baja, John) Boehner y los elementos más extremos y anti-inmigrantes del Partido Republicano siguen haciendo”, dijo hoy a Efe la líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, con motivo del aniversario.
“Espero que el presidente de Estados Unidos (Barack Obama) haga lo más posible para disminuir y eliminar el terror que enfrenta nuestra comunidad inmigrante tras las políticas de los Republicanos, quienes han hecho todo lo posible para causar confusión y desviar la atención de su propia obstrucción y disfunción”, reiteró Pelosi.
Asimismo, el líder de la mayoría demócrata del Senado, firme defensor de una reforma migratoria integral en el país y de la Acción Diferida, reiteró hoy su pesar por los intentos republicanos de acabar con el programa “ahora que estos jóvenes empiezan a tener vidas normales en el país al que consideran su hogar.
“Hace dos años, el presidente Obama tuvo la valentía de tomar la decisión de quitarle la amenaza de deportación a los DREAMers. Me complace que el secretario (de Seguridad Nacional Jeh) Johnson esté supervisando el proceso de renovación de este importante programa”, agregó el senador.
Sin embargo, mientras los republicanos se esfuerzan por acabar con el programa, cuya extensión por dos años más se confirmó en julio, los activistas proderechos de los inmigrantes reclaman a Obama que ante la negativa republicana de aprobar una reforma migratoria, actúe al menos ampliando la DACA a los padres de esos jóvenes que ya han sido amparados por ella.
Las asociaciones proinmigrantes defienden que esta sería una manera de evitar la separación familiar que especialmente sufre la comunidad latina, y piden al mandatario que tome medidas cuanto antes.
“Cuando el presidente optó por utilizar su autoridad ejecutiva hace dos años, enfrentó la obstinación de los legisladores en el Congreso que se negaron a aprobar el DREAM Act”, dijo hoy la presidenta del Consejo Nacional de La Raza (NCLR, en inglés), Janet Murguía.
“Como indica el reciente y vergonzoso voto en la Cámara de Representantes, estamos de nuevo en un callejón sin salida en el Capitolio, con estos mismos legisladores clavados en sus talones en lugar de trabajar hacia una solución para arreglar nuestro sistema roto de inmigración”, agregó.
Por eso, continuó la líder de La Raza, “ahora más que nunca necesitamos que el presidente Obama ejerza un uso legítimo de su autoridad ejecutiva para ampliar el alivio y limitar las deportaciones sin sentido con el fin de mantener unidas a las familias trabajadoras estadounidenses”, reiteró
Sin embargo, Obama se enfrenta también a algunas reticencias en su propia bancada, ya que algunos senadores que se juegan la reelección en noviembre podrían ver peligrar sus asientos con tal maniobra, y a la amenaza de los más conservadores como King, de someterle a un “juicio político” por abuso de su autoridad ejecutiva.
Dos años después de su entrada en vigor, lo cierto es que la DACA ha resultado ser un alivio efectivo para cientos de miles de jóvenes, pero a su vez es algo temporal cuya vigencia más allá de 2016 es una incógnita si no se logra finalmente la reforma migratoria que sigue resistiéndose en los pasillos del Congreso. EFEUSA