Cuando el Distrito Escolar de Los Angeles decide que ya no se consumirá pollo criado con antibióticos en sus escuelas, esto va más allá de una simple medida administrativa.
La cuestión va enfocada en la salud. Y es que ¿qué sucede cuando los alimentos de los niños están produciendo en sus organismos bacterias resistentes a los antibióticos?
Bueno, una simple infección puede derivar en complicaciones diversas que exponen al infante incluso a morir, y aunque este tipo de casos es no es tan común aun, el continuo e innecesario uso de antibióticos los podría multiplicar conforme las bacterias se van volviendo inmunes, esto por las descargas mínimas y repetidas de este tipo de medicinas usadas de forma incorrecta.
Entre las continuas vacunas hechas para engordar a las aves y hacerlas crecer más rápido y el confinamiento perenne de pollos que casi nunca llegan a ver la luz del día y son mantenidos allí de manera insalubre; la industria apícola hoy en día, deja mucho que desear.
Sin embargo, el uso incorrecto de antibióticos a nivel personal es también culpable de que una bacteria en el cuerpo se haga más fuerte en lugar de ser destruida.
Ejemplo de esto es su uso para curar la gripe. Y es que en realidad los antibióticos no curan la influenza, al contrario de lo que muchos adultos piensan según mostró un estudio del CDC (Centro de Control de Enfermedad en inglés). Un antiviral sería lo más adecuado en estos casos.
Tal vez usted solo se pueda imaginar el caos producido cada temporada de influenza en las aulas de clase, que comienzan con el contagio y terminan en ausencias propagantes y continuas.
Y es que es sabido que los niños, por su ignorancia o escasez de prudencia, generalmente pueden portar enfermedades contagiosas, las cuales terminan contagiando a los demás infantes y hasta al personal del colegio, como en los casos de la gripe y la gastroenteritis (gripe intestinal).
Según otro estudio, los niños y los ancianos son más propensos a infecciones por bacterias, siendo las estomacales las que más acosan a los pequeños.
El uso erróneo de antibióticos a nivel personal es por ignorancia, no hay duda. Pero el uso comercial de estos en animales es no solo inadecuado, sino criminal, puesto que se sobreponen las ganancias sobre la salud pública, es por ello que el estado debe regularlo de forma más enérgica, ¿no cree?
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