Estadounidenses poseen un estimado de 265 millones de armas, más de un arma por cada adulto estadounidense, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Harvard dado a conocer por The Guardian. Pero el nuevo estudio estima que 130 millones de estas armas se concentran en manos de sólo el 3% de los adultos estadounidenses – un grupo de super-propietarios que han acumulado un promedio de 17 armas de fuego cada uno.
La nueva encuesta aún no publicada muestra que sólo el 3% de los adultos estadounidenses poseen casi la mitad de las armas en los EE.UU..
Este estudio se da a conocer en el mismo momento en que las agencias de seguridad se dan a la tarea de buscar a los autores de uno o varios autores de haber hecho detonar bombas de fabricación doméstica.
También ocurre en el momento en que los candidatos Donald Trump y Hillary Clinton redondean sus argumentos previos al primer debate.
En este contexto, es evidente que habrá reacciones electorales para descifrar el sentido de los atentados.
Trump ha dicho: “esto muestra por qué tenemos que ser duros”. Este cliché pareciera indicar que se trata de una “idea” nueva, siendo que precisamente esa idea creó el apresuramiento a la invasión a Irak (se buscaba no a quien la hizo, sino quien la pagara).
Pero en estos momentos lo más peligroso sería nuevamente manipular las reacciones naturales de ansiedad de los ciudadanos para hacer avanzar nuevamente agendas basadas en el miedo, antes que en el análisis crítico de las circunstancias.
Desde los atentados del 9/11 y acaso mucho antes, las agencias de seguridad y la administración de Washington ha aprendido mucho y reunido una gran cantidad de evidencias para ser más eficientes, todo esto es demasiado importante como para hacerlo a un lado y hacerle caso a un millonario que desde afuera llega a tambor batiente.
Y no es que Hillary esté libre de posibilidades de error (en la Invasión con Irak, también creyó los argumentos de Bush), pero lo cierto es que conoce mejor desde adentro el coste de tomar ciertas decisiones en cuestiones de seguridad nacional.
Citando al ex jefe de la CIA, Michael Hayden, Clinton ha dicho que la retórica de Trump está dando “ayuda y consuelo a nuestros adversarios”.