Norteamérica, capitalista por excelencia, llamada “tierra de los libres” por muchos, experimenta en el presente cambios drásticos en su política, su economía y su sociedad en general gracias a cambios implementados en la constitución de una forma sutil, paulatina y sagaz bajo las narices del pueblo americano.
Principios tan básicos como la libertad y las garantías individuales han sido transgredidos; para supuestamente adaptarse a los tiempos en que vivimos; argumentando con el terrorismo una amenaza constante.
De esta forma, se implementan leyes que otorgan poderes a las instituciones gubernamentales para realizar detenciones indefinidas sin derecho a juicio o a abogado. Pero sobre todo, dan a agencias como la de seguridad nacional permiso de espiar sobre cualquier ciudadano sin proceso para recibir dicho permiso, y sobre todo, sin pruebas suficientes que justifiquen dicha acción, esto dictaminado en la “Ley Patriótica”, creada durante la administración de Bush y extendida por Obama por cuatro años más en varias de sus cláusulas clave el 26 de mayo del 2011, todo para proveer una “defensa al pueblo norteamericano” bastante intangible y poco creíble.
Inclusive en el presente existen leyes que posibilitan que cualquier persona que realice una actividad percibida como una amenaza a la legitimidad del gobierno, pueda ser vista y detenida como sospechosa de terrorismo doméstico.
Cosas regulares como pagar con efectivo, no mostrar su identificación cuando se lo requieran, expresar sus creencias religiosas o sus dudas sobre el presente gobierno, prepararse para posibles desastres como temblores, etc., son motivos suficientes para considerarlo un posible terrorista.
Vigilancia aérea a control remoto
No hace mucho, el gobierno norteamericano, realizó la adquisición de 30,000 “drones”, o aviones espías manipulados a control remoto. Dichos aviones tienen la capacidad de espiar vía aérea, tomar video y fotografías de objetivos definidos y hasta destruir dichos objetivos con una precisión impresionante sin causar daños colaterales.
El problema con una tecnología como esta circulando por el espacio aéreo estadounidense es no solo el obvio y posible abuso por parte de las autoridades, sino que dicha medida no tuvo un debate dentro del congreso. Vamos, no fue siquiera comentada por parte de los candidatos a la presidencia; mucho menos por los medios de comunicación.
En el presente se está trabajando en tecnologías nuevas que produzcan micro vehículos aéreos del tamaño de insectos que tengan la capacidad de tomar foto, video y hasta matar sin ser detectados.
Esta cultura de la sospecha ha generado situaciones que serían propias de un régimen autoritario. Pero, un momento, recuerde que estamos en América, eso no es posible- ¿o lo es?
Bueno, el hecho es que la elaboración de leyes como estas -que ya son varias, haga su investigación-, la toma de medidas para “prevenir” supuestos ataques en tierra estadounidense, nos da la idea de un control gubernamental tirante al comunista que no se había dado en América desde… nunca.
El mantener vigilancia sobre los americanos es una tarea que el gobierno se ha tomado muy en serio. Aunque el bajo perfil del pase y expansión de leyes, además de la adquisición de dicha tecnología, irónicamente a su vez, da lugar a muchas sospechas.
Esta claro que todo lo hecho en materia de seguridad se está dando por posibles insurgencias masivas que puedan resultar en el país.
Los simulacros hechos cada año por la policía en las grandes ciudades podrían ser una muestra de lo dicho.
Los ataques constantes a las clases media y baja por medios legales, los cortes presupuestales sobre programas sociales, la poca mejora de la economía, las guerras continuas; etc.; todos estos factores terminan pesando en la psiqué de la gente.
Mientras tanto, el incremento en el control gubernamental se hace cada vez más notorio.
¿Será posible que hayan cambiado tanto las cosas en “América, tierra de los libres”? Pues empiece por creerlo.
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